Tras una alerta ciudadana, los marsupiales fueron rescatados en Piedra
Azul. Se preparaban para hibernar cuando talaron el árbol donde vivían, el
que iba a ser destinado como leña para el invierno.
Alertados por una familia residente del sector de Piedra Azul en la Carretera
Austral, funcionarios de Seguridad Ciudadana rescataron y transportaron a tres
ejemplares de monitos del monte hasta las oficinas del Servicio Agrícola y
Ganadero en Puerto Montt, organismo que derivó a los animales hasta el Centro
de Rehabilitación de Fauna Silvestre (Cerefas) de la Universidad San Sebastián.
Los pequeños marsupiales fueron hallados en la leñera, refugiados dentro de un
tronco, el que iba a ser usado para alimentar una estufa a leña. Allí se preparaban
para hibernar una hembra adulta y sus dos crías, ambas hembras juveniles.
Listos para el invierno
Al ser recibidas en el recinto universitario, la profesional a cargo y académica de la
carrera de Medicina Veterinaria en la sede De la Patagonia, Cinthia Bustamante,
informó que las jóvenes crías se encontraban en proceso de acumulación de
reservas en la base de su cola, preparándose para entrar en estado de “sopor”
durante el invierno.
Explicó la especialista que esta adaptación fisiológica les permite reducir su tasa
metabólica y temperatura corporal, un estado que puede durar desde horas hasta
meses, dependiendo de las condiciones ambientales. Generalmente éste estado
natural dura la época de invierno, donde las temperaturas son bajas y la
disponibilidad de alimento es menor.
Buscando nuevo hogar
Actualmente, las “monitas” están siendo hidratadas con suero, ya que no
presentaban lesiones que requirieran medicación. Además, se les está
proporcionando una dieta rica en proteínas de insectos y frutos, esencial para que
acumulen las reservas necesarias y puedan enfrentar el invierno en óptimas
condiciones.
«Estamos muy contentos de informar que los monitos se encuentran en buen
estado de salud. Nuestro objetivo es alimentarlos adecuadamente para que
puedan ser liberados la próxima semana», afirmó Bustamante.
La especialista destacó el rescate para preservar la fauna nativa local. “ Es un
ejemplo de cómo el cuidado y la intervención adecuada pueden marcar la
diferencia en la conservación de nuestra fauna silvestre», puntualizó.

El equipo del Cerefas continúa trabajando arduamente para asegurar que los tres
monitos estén listos para su reintroducción en su hábitat natural, para lo cual le
prepararon un refugio con temperatura artificial, similar a la de su entorno,
buscando garantizar así su supervivencia, y que sean reintroducidos en óptimas
condiciones por si requieren hibernar.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *